Cuando una solicitud de servicio no incluye ordenante, el servicio se presta en nombre del cliente directo de la organización correspondiente.
Sin embargo, cuando una solicitud de servicio sí incluye ordenante, el servicio se le presta al cliente, pero a nombre del ordenante. El cliente al que se le presta el servicio no es el de la organización, sino el del ordenante.
En cuanto a la facturación, los datos que se cargan por defecto son los del ordenante (cliente facturado, tercero pagador, etc.). Por lo tanto, hay que crear una ficha de cliente para el ordenante.
Esto permite identificar a la población de ordenantes.
Esta opción es obligatoria si quieres vincular los clientes a sus respectivos ordenantes.